lunes, 16 de abril de 2007

Una rosa puede ser eterna

Bueno, se acerca el 23 de abril, para muchos no significa nada, pero en algunas regiones se celebra "Sant Jordi", en mi caso, el de Catalunya, se trata del patrón de la comunidad y es típico que entre enamorados se regale un libro para el hombre y una rosa para la mujer. (Sí, la verdad es que el intercambio no es muy, económicamente hablando, equilibrado).

Mientras que los libros son para siempre, o casi, las rosas solo duran un par de días en buen estado y ya empiezan a marchitarse, está la solución de comprar una de cerámica, cristal, etc. Pero, ¿no sería más interesante hacer una uno mismo?



Pues aquí tenéis la solución, hacer una rosa de papel, así que sin más preámbulos, pasamos a la acción y como de costumbre, empezamos por el material.


MATERIAL

Rosa
· hoja de papel, preferiblemente cuadrada, pero con un DIN-A4 nos apañamos.
· esencia de rosas, no es imprescindible, pero le da un toque único.

Tallo
· alambre, el grosor no importa mucho, pero aprox. 1mm está bien.
· papel "pinocho" color verde oscuro, (el nombre no se si es el correcto, pero así es como lo conozco) es un papel rugoso que se vende en rollos.
· cola blanca, sobran las palabras.


ROSA

Para hacer la rosa necesitamos como base un papel cuadrado, si no lo tenemos, en su defecto utilizamos un DIN-A4 o un folio. Para hacer el cuadrado cogemos la hoja i le hacemos un pliegue en diagonal para conseguir dos triángulos sobrepuesto, ese trozo es el cuadrado y cortamos la parte sobrante.

Una vez tenemos la hoja cuadrada pasamos a hacer los primeros pliegues, doblamos por la mitad en vertical de tal modo que hagamos un rectángulo.



Luego abrimos y hacemos lo mismo pero en horizontal, volvemos a abrir y nos tiene que quedar la hoja con una cruz marcada.




Ahora cogemos las esquinas y doblamos de tal modo que cada una de ellas nos quede tocando en el centro del papel.



Desde esta forma repetimos el procedimiento anterior, en este caso las cuatro esquinas plegadas las juntamos en el centro. Si no queda perfectamente cuadrado no pasa nada, al terminar la rosa no se notarán los defectos.



Ahora cogemos el cuadrado y lo doblamos por la mitad hacia el exterior, de tal modo que tengamos un rectángulo al que se le ve una pirámide central y dos en las esquinas.



Volvemos a doblar por la mitad, pero en sentido lateral, hasta conseguir un cuadrado con un pliegue diagonal.



Ahora viene una de las partes complicadas de explicar, cogemos una de las esquinas y la abrimos de tal modo que hagamos un triángulo.



Juntamos la nueva esquina con la parte superior de la pirámide y repetimos el procedimiento con el resto de puntas como muestra el vídeo.



Y por fin llegamos a la parte más delicada, estad atentos al vídeo ya que es el mejor modo de explicar el siguiente paso, se trata de abrir la flor, para ello tenemos que tirar hacia el exterior lentamente y por partes.



Si nos pasamos tirando con demasiada fuerza nos pasará lo siguiente.



Y por fin llegamos al final, ahora entra en juego el bolígrafo o cualquier utensilio redondo, tenemos que coger cada una de las puntas y redondearlas hacia fuera o hacia dentro, como deseemos, con la ayuda de la superficie redonda del bolígrafo, hasta conseguir la rosa.



¿A que no ha sido tan difícil? Pues bien, podemos dejarla así, o hacerle también el tallo, aquí también podemos añadirle unas gotas de esencia en el interior de la rosa para darle un toque más real.




TALLO

Una vez echo el capullo de la rosa viene la parte más fácil, para empezar necesitamos hacer una estructura resistente pero al mismo tiempo flexible para poder darle la forma que queramos y que se aguante sola.

Para ello cogemos un trozo de alambre que mida un poco más de 2 veces la longitud que queramos que tenga el tallo y lo doblamos por la mitad de tal modo que nos quede en forma de "U".



Ahora enrollamos las dos partes para conseguir una forma trenzada, este paso se puede hacer manualmente o con ayuda de un atornillador o taladro.




Una vez tenemos la estructura deseada la forramos con el papel de pinocho, para ello cortamos una tira larga y fina y la enrollamos alrededor de la estructura hasta cubrirla totalmente.



Ahora ya solo nos queda pegar el tallo al capullo, doblar la estructura para darle la forma que queramos y si tenemos paciencia y ganas, podemos hacerle unas pequeñas hojas con trozos de papel verde o con el mismo papel de pinocho, pero eso ya es cosa vuestra. :)


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